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Para los órganos judiciales cubanos, el 2022 será un año marcado por el enorme desafío de implementar nuevas leyes procesales, para lo cual sus integrantes se preparan cotidianamente conscientes de que, con ello, continuarán elevando la calidad del servicio judicial. Así quedó patentizado en la Reunión anual de trabajo del Sistema de Tribunales, que inició el 4 de febrero, en La Habana.
La misma estuvo presidida por el titular del Tribunal Supremo Popular (TSP), Rubén Remigio Ferro; la Fiscal General de la República, Yamila Peña Ojeda; el presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales y Jurídicos de la Asamblea Nacional, José Luis Toledo Santander; la viceministra del Ministerio de Justicia, Rosabel Gamón Verde y el jefe de la Dirección General de la Policía Nacional Revolucionaria, G.B. Oscar Callejas Valcárcel.
Asistieron, además, diputados al Parlamento cubano, representantes del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Administración Pública, de la Organización Nacional de Bufetes Colectivos, así como miembros del Consejo de Gobierno, magistrados y directivos del máximo órgano judicial; integrantes de la Dirección de Tribunales Militares; presidentes, vicepresidentes y presidentes de salas de justicia de los tribunales provinciales y presidentes de los tribunales municipales cabeceras, entre ellos, valiosos jóvenes que asumen tan alta responsabilidad.
Al comentar cómo se encuentra conformada la plantilla del Sistema de Tribunales, particular con el cual se inició el encuentro, Remigio Ferro destacó que la mayoría de sus integrantes son féminas, lo cual se viene reflejando desde hace varios años y constituye una verdadera fortaleza para nuestras instituciones. Así sucede con los jóvenes, cuya presencia ha ido en ascenso y junto a los más experimentados nos dotan de energías inagotables.
Correspondió a los presidentes de las Salas de Justicia del TSP exponer cómo se gestionó la calidad de cada materia en el año que recién concluyó, así como las principales proyecciones para este 2022. El tema fue punto de partida para escuchar a integrantes de los consejos de gobierno de los TPP y a los presidentes y vicepresidentes de TMP quienes transmitieron sus experiencias sobre cómo el contexto impuesto por la pandemia los llevó a diseñar estrategias y maneras novedosas para resolver los procesos, respetando siempre los derechos y garantías de las partes.
Al respecto, el presidente del TSP, reconoció que uno de los factores determinantes fue el deseo y la voluntad de nuestra gente de hacer las cosas bien, con empeño, consagración y sacrificio. “Donde hay un buen ambiente de trabajo, de solidaridad y de unidad, estos resultados se logran por sí solos. Y lo hacemos de cara al pueblo, que es precisamente lo que distingue la actuación de los jueces cubanos en su permanente vocación como servidores públicos”.
El entusiasmo, la disposición y la unidad que distinguen a los trabajadores de los órganos judiciales cubanos siguen siendo denominadores comunes en cada uno de estos encuentros, como reflejo de lo que acontece en cada provincia y municipio del país. Y no podía ser diferente, pues la tropa judicial cubana se empeña en cumplir con esa honrosa misión otorgada por mandato constitucional de impartir justicia a nombre del pueblo.
