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A los 17 años de edad, el período de práctica laboral podría convertirse en el trabajo de toda la vida. Así lo han podido comprobar los padres y los 10 estudiantes de Técnico Medio en Secretariado Operador de Microcomputadoras que cumplimentarán a partir de hoy este importante proceso de su etapa estudiantil.
Las salas de justicia del Tribunal Supremo Popular (TSP) de Cuba recibirán por primera vez a jóvenes de penúltimo año del Instituto Politécnico “Fernando Aguado y Rico” (sito en Centro Habana), quienes, al concluir la práctica pre-profesional, se graduarán, además, en la especialidad de Secretario Judicial.
“Ustedes ya son parte de nosotros mismos. Y cuando terminen sus estudios, pudieran continuar trabajando aquí”, aseguró el vicepresidente del TSP, Oscar Silvera Martínez, agregando que contribuir con la consolidación y desarrollo de sus competencias profesionales es de alta prioridad para el TSP.
Por su parte, la jefa del departamento de Comunicación Institucional apuntó la importancia del funcionamiento de la tríada TSP-estudiantes-familia para lograr ese sueño, e introdujo la visión de que ellos podrían ser la semilla para que la institución sea “una unidad docente de altos quilates” en el país.
Este también será un ambiente favorable para la formación de valores y el aprendizaje del comportamiento en los entornos laborales. A su vez, los estudiantes le tributarían al TSP los conocimientos ya adquiridos en su especialidad y la impronta y dinámica juvenil en cada uno de los espacios.
En el encuentro, caracterizado por un clima camaraderil, de acompañamiento permanente y compromiso con la institución, estuvieron presentes también profesores de los jóvenes estudiantes, así como representantes de las áreas y organizaciones de un colectivo que, además de cumplir su misión fundamental de impartir justicia, fomenta la contribución a la formación de los futuros profesionales que el país necesita.
Al concluir el encuentro, varios familiares manifestaron estar seguros de la altísima responsabilidad que también ellos contraen, al tiempo que expresaron estar muy tranquilos porque el porvenir de sus hijos está en buenas manos.
