- 9 vistas

Nuevamente el Tribunal Supremo Popular se llena de la energía vital que emana de los jóvenes que llegan para forjar sueños y beber de la sabiduría.
En esta ocasión, los protagonistas son los estudiantes del Politécnico Raúl Cepero Bonilla que se preparan como Técnico Medio en Derecho y ven su futuro profesional en una institución que tiene, como vocación y razón de ser, la impartición de justicia.
En la visita, los jóvenes admiraron el valor patrimonial del inmueble en su centenario de construido (1917-1919) y el cuidado con que se preserva la memoria histórica. Conocieron de los valores que caracterizan a sus trabajadores y sobre todo agradecieron el intercambio con quienes se desempeñan en las secretarías judiciales, especialidad en la que se forman como futuros profesionales del Derecho.
Los estudiantes acogieron con beneplácito la historia de vida de Deysi, quien lleva más de 30 años dedicada al servicio judicial. Sintieron muy cercanas las palabras de Nazarena y de Leonardo, quienes desde su visión y compromiso juveniles contaron cuánto agradecen la oportunidad de servir en tan importante tarea y las posibilidades que tienen de crecimiento profesional y personal en el Sistema de Tribunales.
Los jóvenes recibieron con emotividad la presencia de Seila María de los Ángeles García, mujer vital y octogenaria a quien todos con cariño llaman Nené, y que desde 1959 entrega su talento y energías como secretaria en favor de la actividad judicial. Con un aplauso cerrado la premiaron cuando aseguró: no concibo vivir sin mi tribunal.
La vicepresidenta del (TSP), Farah Saucedo Pérez, quien cordialmente compartió con los jóvenes visitantes, aseveró sentirse feliz y emocionada con el intercambio, porque vislumbró el futuro promisorio si se cuenta con jóvenes así. Los exhortó a continuar cultivando valores y conocimientos que harán de ellos buenos profesionales con los que se podrá contar. Les garantizó también, que las puertas del Sistema de Tribunales siempre estarán abiertas para recibirlos.
Previo al encuentro, los jóvenes estudiantes de Técnico Medio en Derecho intercambiaron con magistrados y secretarias judiciales y todos juntos celebraron el aniversario 30 de la Convención de los derechos del niño, que Cuba cumple y de la que ellos son una evidencia fiel.

