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Por los tribunales provinciales populares (TPP) de Ciego de Ávila y Las Tunas iniciaron, la pasada semana, las reuniones anuales de trabajo de dichos órganos judiciales. Hasta ellos llegaron Rubén Remigio Ferro y Yamir Rodríguez Tamayo, presidente y vicepresidente del Tribunal Supremo Popular (TSP), respectivamente, para participar en dos encuentros profundos, dinámicos y autocríticos.
A estas citas de trabajo asistieron, además, las máximas autoridades del Partido y el Gobierno en las provincias, miembros de los Consejo de Gobierno, presidentes de tribunales municipales populares (TMP), jueces, directivos y demás trabajadores de dichos órganos judiciales.
Amplios debates en torno a cómo continuar elevando la calidad del servicio que brindamos caracterizaron ambas jornadas, en las que se les pasó revista, entre otros temas, al cumplimiento de los principales indicadores que inciden en la actividad judicial, a la formación y capacitación de los jueces, al proceso de informatización que se lleva a cabo en los tribunales cubanos y a la comunicación institucional como herramienta para continuar elevando la cultura jurídica del pueblo.
Asimismo, Remigio Ferro se refirió a la principal tarea que tendremos para este 2022: garantizar la adecuada implementación de las nuevas leyes procesales y las relativas a la organización y funcionamiento de los tribunales, dada la relevancia y significación de estas. En este orden, significó que, sin dudas, ello será posible gracias al entusiasmo y energías que caracterizan a la gran familia judicial cubana.
En tierra avileña, el titular del TSP tuvo la oportunidad de intercambiar con jóvenes estudiantes de la Facultad de Derecho que integran el proyecto “Somos Futuro”, liderado por la Universidad Máximo Gómez Báez. Con ellos dialogó sobre sus experiencias en los tribunales, los conocimientos y habilidades adquiridas y las labores que en ellos han desarrollado.
Este tipo de encuentros seguirán aconteciendo durante todo el mes de febrero y, de seguro, devendrán espacios para reflexionar en cómo hacer mejor lo que nos toca, enfocados en la alta responsabilidad que nos ha sido dada por mandato constitucional: impartir justicia a nombre del pueblo.