- 87 vistas
En el ideario martiano y fidelista se encuentran las semillas que forjaron la Revolución cubana. Entre ellas, la participación popular en la administración de justicia.
En el pensamiento de nuestro Héroe Nacional José Martí se encuentran múltiples alusiones a la importancia de que el Derecho y la impartición de justicia en la patria libre estuvieran profundamente caracterizados por su esencia eminentemente popular: «En los pueblos libres —decía el Maestro—, el Derecho ha de ser claro. En los pueblos dueños de sí mismos, el Derecho ha de ser popular».
En Cuba, desde el contexto de nuestras gestas emancipadoras, la función de impartir justicia se encomendaba a personas de origen humilde, no tituladas en Derecho, sobre la base de su reconocido prestigio y cualidades morales, dotadas de un profundo sentido de justicia, ponderación y buen tino.
Fiel continuador de las ideas de Martí, Fidel, en su alegato de autodefensa por los sucesos del Moncada, La historia me absolverá, expresó: «Mi lógica, es la lógica sencilla del pueblo». Con esta frase, el líder histórico anticipó su firme convicción de que solo incorporando a la administración de justicia la inteligencia del pueblo, su perspicacia para discernir entre lo que es justo y razonable de lo que no lo es, podría la actividad judicial transformarse en el eficaz servicio a la ciudadanía en una sociedad en que todo el poder estaría precisamente en manos del pueblo.
En los primeros años de la Revolución en el poder, el día 12 de octubre de 1962, el Comandante en Jefe se reúne con los estudiantes y algunos profesores de la Escuela de Ciencias Jurídicas de la Universidad de La Habana y les da la tarea de organizar, de forma experimental, tribunales populares, para materializar la idea de introducir la participación del pueblo en la administración de justicia.
Este trascendental momento marcó la justicia judicial cubana, al distinguirla por su manifiesto carácter popular. Por lo que esto representa para nuestros órganos judiciales, el Consejo de Gobierno del Tribunal Supremo Popular, en el marco de la conmemoración por el aniversario 50 de constitución del Sistema de Tribunales, que celebramos este año, instituyó el 12 de octubre como Día del Juez Lego Cubano.