Reunión Anual del Tribunal Supremo Popular de Cuba: Balance y Proyecciones para 2025.

La Habana, 17 de febrero de 2025 – El Tribunal Supremo Popular de Cuba (TSP), celebró su reunión anual de trabajo con la participación de Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Salvador Valdés Mesa, Vicepresidente de la República de Cuba, y Roberto Morales Ojeda, Miembro del Buró Político y Secretario de Organización del Comité Central del Partido.

El encuentro, que tuvo lugar en la capital cubana, sirvió para evaluar los resultados del año 2024 y trazar las principales proyecciones para el 2025, con el objetivo de fortalecer el sistema judicial y garantizar una justicia más eficiente, transparente y accesible para el pueblo.

Resultados destacados en 2024

En el encuentro, conducido por el presidente del Tribunal Supremo Popular, se proyectó un video que mostró el informe detallado sobre la actividad judicial durante el año pasado. Entre los logros más significativos, se destacó el cumplimiento de los términos y plazos en la mayoría de los asuntos en tramitación, pues se logró la resolución del 89.4% de los asuntos judiciales y la ejecución efectiva del 93.6% de las resoluciones, sin embargo, se mantiene la visión enfocada en los que han presentado dilaciones, en ocasiones por su propia complejidad y en otras por deficiencias a las que se les presta atención y se adoptan medidas para su erradicación.

En el ámbito del enfrentamiento a la corrupción, el delito y las ilegalidades, se constató que las sanciones más rigurosas se aplicaron en correspondencia con los hechos de mayor gravedad, entre los que se encuentran las tipicidades delictivas asesinato, robo con violencia o intimidación en las personas, tráfico de drogas, seguidos por los delitos de sacrificio ilegal de ganado mayor, robo con fuerza en las cosas, atentado, corrupción de menores, malversación y evasión fiscal, respetando el debido proceso y garantizando los derechos de los ciudadanos. Así como, se mantuvo un estricto control en la concesión de beneficios de excarcelación anticipada para estos delitos graves.

La actividad de atención, control e influencia a personas que extinguen sanción en libertad, alcanzó un 88.6% de efectividad, consolidándose como una práctica positiva. Provincias como Matanzas, Artemisa, La Habana y Santiago de Cuba resaltaron por la vinculación de los sancionados a proyectos comunitarios, lo que ha contribuido a su reinserción social.

Desafíos en recursos humanos y capacitación

Uno de los temas abordados fue la fluctuación de personal, especialmente de jueces y secretarios judiciales, que incidió más pronunciadamente, en provincias como Villa Clara, Artemisa, Cienfuegos y Sancti Spíritus. Para enfrentar esta situación, se enfatizó en la necesidad de mejorar la gestión de recursos humanos, en la atención, motivación del personal y en la creación de ambientes laborales adecuados.

Además, se destacó la importancia de la capacitación y preparación del personal, con un incremento en las acciones de postgrado, con ascenso en la cantidad de másteres, especialistas y doctores en el ámbito judicial, cuyos trabajos de diplomas tributaron directamente a la calidad de la justicia.

Transformación digital y ciencia e innovación

La transformación digital de la justicia cubana fue otro de los ejes centrales de la reunión. Se destacaron avances en el Expediente Judicial Electrónico y el Sistema de Gestión Estadística, proyectos que han contribuido a modernizar la actividad judicial. Además, se aprobaron la política y la agenda de transformación digital con miras al 2030, que incluye cinco salidas estratégicas para dinamizar la calidad de la justicia y acercarla a los ciudadanos, quienes se constituyen en lo más importante dentro de este proceso que persigue su bienestar.

En el ámbito de la ciencia e innovación, se resaltó el trabajo del Consejo Científico y el Programa Sectorial de Ciencia e Innovación, con 6 proyectos iniciados en 2024 y 5 aprobados para 2025. La magistrada Rufina Hernández Rodríguez, reconocida con la Orden Carlos J. Finlay y la condición de Investigadora Emérita, enfatizó en la importancia de la ciencia y la innovación para resolver los problemas del sistema judicial, expuso sobre los aportes de las acciones innovadoras en los tribunales cubanos, incluidos los del ámbito de los cambios legislativos y reconoció el destacado resultado de la tesis del doctorado del juez Yoel Quinta Arango, quien forma parte de uno de estos proyectos que ya empiezan a cerrar ciclos, con impactos favorables en la justicia.

Proyecciones para 2025

Las principales proyecciones para el próximo año incluyen el cumplimiento efectivo de los plazos y términos, la argumentación y fundamentación de las resoluciones judiciales, el cumplimiento efectivo de las sentencias, la consolidación de la actividad de atención control e influencia en personas que extinguen sanciones en libertad, continuar la capacitación y preparación del personal, mejoramiento y perfeccionamiento de la gestión de los recursos humanos para reducir la fluctuación, avanzar en la transformación digital, garantizar la calidad en las acciones de comunicación institucional y fortalecer la labor política e ideológica de los trabajadores y mejorar la gestión de recursos humanos para reducir la fluctuación de personal.

Intervenciones destacadas

Durante el debate que se suscitó, intervinieron jueces jóvenes, decanos de facultades de Derecho, estudiantes y recién egresados de las diferentes enseñanzas asociadas al Derecho, quienes resaltaron la importancia de la vinculación entre el sistema judicial y las universidades. También se destacó el papel del Grupo Temporal de Trabajo para la Transformación Digital, y se explicaron los avances en este ámbito durante 2024.

Palabras de clausura

El Vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa, cerró la reunión reconociendo los resultados positivos alcanzados en un año complejo y desafiante. Aunque señaló que persisten dificultades, como la fluctuación de personal y la necesidad de mejorar la gestión de recursos humanos, precisó que existen alternativas y posibilidades de mejora. Quien concluyó expresando que, "No obstante las dificultades, no ha menguado en los tribunales cubanos, la capacidad para enfrentar la corrupción, el delito y las ilegalidades.

La reunión anual del Tribunal Supremo Popular de Cuba reafirmó el compromiso del sistema judicial con la transparencia, la eficiencia y la justicia, en línea con las prioridades del país y el legado de la Revolución; y en el año 2025, se tiene el propósito y la firme convicción de que no habrá "Ni un paso atrás".